Tras la finalización de la exposición, cuando las puertas cierran al público general, llega un momento muy especial; el de la mirada infantil hacia las obras expuestas.
Los alumnos del colegio Sancho Ramírez de Arguedas visitan LaCapilla para encontrarse con las obras que allí se encuentran. Cada ocasión, un nuevo descubrimiento. Una sorpresa, con otros enigmas a descubrir.
Las obras inundan sus miradas, y ellos las enriquecen con sus percepciones e interpretaciones, generándose un diálogo muy rico.
Durante este pasado año, han sido ya unas cuantas las visitas del colegio, en próximos post os las iré mostrando. En esta ocasión, la exposición Aprendices y Maestros brindó la oportunidad a estos niños para convertirse en los aprendices que observan la obra del Maestro elegido y a través de ella aprehenden su saber hacer.
Posicionarse con admiración ante el legado que los grandes maestros nos han dejado y aprender todo lo posible de ellos, es un acto que tanto niños como adultos han realizado a través de esta particular exposición homenaje a algunos de los grandes maestros de la Pintura del siglo XIX y XX.
Seguro que ahora muchos de los asistentes a estos talleres didácticos ya tienen más respuestas a la pregunta inicial de ¿Qué cuadro te resulta conocido o familiar de los que ves aquí expuestos? Más allá de los girasoles de Van Gogh. Y sobre todo, habiéndolo conocido desde la experiencia de mirar para pintarlo. Esa ya no se olvida.
Como en anteriores ocasiones, fue un verdadero placer disfrutar con todos los niños y niñas que asistieron, de este nuevo encuentro con la creación artística. Nos lo pasamos genial!!
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